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El día 28 de Octubre se ha celebrado en el club de Albacete, una discreta quedada gastronómica, y de paso, se han volado unos cuantos aeromodelos. Pero, que conste que eso no era lo principal.
Climatológicamente, el sol lucía espléndidamente, pero hacía un “fresquito” considerable.
También hay que decir que las instalaciones del club tenían perfectamente cubierta esa eventualidad (la del “fresquito” considerable)
Y por si la chimenea no era suficiente, para empezar, nos calentamos por dentro con unos huevos + chistorra, regados con vino abundante.
Una vez que todos habíamos entrado en “calorcito”, nos acercamos a la pista y se marcaron unos vuelecitos soberbios.
Los Gago, padre e hijo, en equipo, abrieron el baile con una impresionante Dimona Katana.
Después del vuelo, así quedó de “desmayado” el piloto de la Dimona (fotocopia de Paco Gago)
Miguel Ángel, con un Extra 500-70
Rafael Illan como su nombre indica, voló un Rafale (no podía ser de otra forma).
Paco Ibáñez y su Sukhoi 31M.
No se lo digáis a nadie. Peeeeeeero……..por allí pasó este F1 de verdad. Eso sí, ¡muy alto! (con el “potochop” se hacen maravillas. ¿A que parece que está cerca?)
Clemente con su Foker D VI.
Margallo con su Tiger, prácticamente “desconocida”.
Jesús Ruiz con un heli Titan X 50.
Antonio Bermejo con una Bucker, armada con un fumígeno “casero”.
El equipo Gago se dispone a remolcar un inmenso KA 6 con un Bidule.
Primero comprueban que el Bidule va como debe.
Una vez comprobada la respuesta favorable del Bidule, se procede al remolque, suelta y vuelo impresionante del KA 6.
Se aprovechó también el Bidule para remolcar el ASW 28 de Manuel Lloret.
Ya en el aire, volaron al unísono y juntitos, pero sin arrimarse demasiado, el KA 6 y el ASW 28.
El equipo Gago también remolcó un precioso Fox.
Ángel Villalba con un autogiro C-30.
Julio Barba nos enseñó un precioso Heindeker, que no voló (todavía estaba a falta de algunos detalles).
Lo que si que voló fue un Space Walker.
Los más valientes se atrevieron con sendas “currutacas”. A saber……..Pascual con una “Mariquita”. Se le desintegró en vuelo, ni siquiera me dio tiempo a “fotarla”.
Y Ginés, con otra “mariquita”, esta si que llegó entera al suelo.
Manuel Lloret con un F8F.
Lo cierto es que la mañana se nos pasó “volando”. Y nos fuimos a comer.
Miguel Ángel nos preparó un soberbio y delicioso arroz negro.
La comida transcurrió con gran camaradería.
Lo cierto es que lo bueno dura poco.
Un saludo
Puente
